Como he comentado alguna vez, mi Volkswagen T3 Syncro luce un color azul que da miedo verlo de cerca. De origen era un azul metálico llamado Medium Blue pero a alguien se le ocurrió cambiar a otro azul. No debió costar mucho la chapuza pues no enmascararon, aplicaron masilla sin lijar y no les importó pintar incluso zonas del habitáculo.
Por supuesto la parrilla de plástico delantera no se libró de esta capa de pintura. Incluso hay zonas del interior de la furgoneta a las que le llegó esta hermosa pintura. Su aspecto horroroso hizo que priorizara su cambio a un color negro. Con lo que empecemos…
Proceso de pintado de la parrilla
Lo primero por supuesto, es desmontar la parrilla. No es nada complejo, tiene una especie de tornillos de plástico que hay que girar unos 90 grados para que se liberen. Creo recordar que van cinco. Lo único que hay que llevar cuidado es de no intentar sacarlos del todo. Tan solo girar.
Una vez fuera, lijamos superficie para abrir el poro.
Una vez pasada la lija, quitamos los restos que hayan quedado sobre la superficie con la pistola de aire. Y empezamos a dar capas de pintura. En mi caso, como ya he dicho, utilicé pintura negra mate RAL9005 en spray.
Se le van dando finas capas hasta conseguir cubrir toda la superficie. Es decir, no hace falta que en la primera capa se cubra por completo la superficie. En la segunda o tercera capa ya se conseguirá.
Esperamos cumpliendo con los tiempos de secado que propone el fabricante. Una vez seca, podemos volver a montarla en su sitio y ver cómo luce.
La verdad es que el cambio es brutal. Hay que ver cómo cambia tan solo por pintar la parrilla.
Lo siguiente que pintaré son los espejos retrovisores que están pelados. También le llegará el turno al parachoques de delante ya que viene cromado y no me gusta así.